Desde hace unos días está a la venta en España el Chromecast, un aparatito que se conecta a la televisión mediante HDMI y que permite reproducir vídeos, música e incluso páginas web en la pantalla más grande -en muchos casos, claro- de la casa.

Puse una fotografía en Instagram y varias personas me han preguntado sobre el aparato, así que he decidido poner un pequeño comentario aquí.

Lo primero, el envío: el aparatito se encargó el día 20 (se puede comprar directamente en la tienda de Google y también en Amazon; esta unidad fue adquirida de esta segunda forma) y estaba en Zaragoza al día siguiente. Lamentablemente, la dirección de recepción no estaba operativa ese día y se ha quedado todo el fin de semana en los almacenes del transportista hasta que esta mañana que me lo entregaron.

La cajita es pequeña e incluye el propio dispositivo, un transformador, un cable micro-USB para la necesaria alimentación y un alargador de HDMI para facilitar la instalación cuando sea necesario.



El siguiente paso es conectarlo: se enchufa el alimentador al dispositivo y a la corriente, se conecta a la tele y con nuestro teléfono y el app que proporciona Google nos disponemos a configurarlo.
El app reconoce el dispositivo, nos pregunta por los datos de configuración de la red Wifi de nuestra casa y empieza a actualizarse: descarga lo que necesita, los instala, se reinicia y ya estamos en marcha.

Cuando vemos vídeos en nuestro teléfono (y algunas cosas más) nos aparece un icono nuevo que permite 'enviar' lo que estamos viendo al Chromecast:



Mientras tanto, podemos hacer lo que queramos con el teléfono, que simplemente actúa como un mando a distancia controlando la operación: modificar el volumen, añadir vídeos a la cola de reproducción, ... O jugar al Apalabrados como hemos hecho siempre, mientras en la tv se ven los vídeos.
Además de ver vídeos en YouTube se puede acceder a la tienda de vídeos de Google, a la tienda de música (y ver y escuchar los vídeos y grabaciones que tengamos almacendos por allí; por ejemplo, esos mp3 que subimos en su día para hacer algunas pruebas).
Y en este momento, poco más, no hay muchas apps disponibles en nuestro contexto.

Además, si usamos Chrome (o su versión libre, Chromium) podemos instalar una extensión (Google Cast) con la que podremos enviar a la pantalla de tv cualquier pestaña de nuestro navegador. Por ejemplo, esta misma página web:



Las primeras impresiones son claras: fácil de instalar y manejar, permite compartir en la pantalla grande esas cosas que a veces estamos viendo en privado y queremos compartir. O hacernos una sesión de vídeo-dj en casa, alquilar alguna película (tenía ganas de probar eso pero me daba pereza hacerlo porque tendría que conectar un ordenador a la tele, buscar los cables adecuados, .... ahora parece todo mucho más sencillo).

Si tratamos de controlar el Chromecast desde más de un móvil u ordenador no hay ningún problema (o todos los problemas, claro): el último dispositivo que da la orden es el que se obedece. Se acabaron las guerras por el mando, porque todo el mundo puede tener el suyo.

Sorprendentemente, no se puede (o yo no he encontrado el modo) enviar una página web que estemos viendo en el teléfono al dispositivo. Tampoco parece posible ver fotografías de nuestra galería.

Etiquetas: chromecast, pruebas, reseñas, novedades, google, aparatos, dispositivos, tv

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