Carpe Diem
Estás jubilado.
Todavía haces algunos negocios.
Tienes 5 millones de pesetas en casa (30 mil euros?).
Te los roban.
Posiblemente, presuntamente, a lo mejor, la inmigrante que tenías en casa para hacerte las tareas, a la que le habías arreglado la boca que tenía destrozada, y que seguramente también ha hecho cosas por ti que no se pagan con dinero.
Te llevas un gran disgusto.
Te da un infarto.
Te mueres.
Fin.
Eres un hombre maduro (pero no viejo).
Estás casi en la cima de tu carrera profesional (sea lo que sea eso).
Empiezas a saltar a otros campos, puesto que profesionalmente ya lo eres casi todo.
Haces demasiadas cosas, tienes mucha presión.
Una subida de tensión.
Se te revienta una vena de la nariz.
Eso te salva la vida.
Continuará (?).
Eres un tirano.
Metes en la cárcel a tu suegro.
Tu suegro era un alto cargo en el ejército, y había amenazas de golpe de estado.
Las tres historias son reales. Bueno, de la última me fío menos, que la he leido/escuchado en la prensa ;). Las otras dos las conozco casi de cerca y no saldrán en los periódicos (me las contaron personas directamente relacionadas con los casos).
Carpe Diem.
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